Estètica, color, guió i muntatge
Estètica
Imatges de Mabry Campbell
Imatges d'exemple de Berta Vicente
Para ser riguroso y pertinente, el enfoque estético de un objeto tiene
que basarse primero en un enfoque sensible de este objeto, y luego en su
enfoque teorético. Son fundamentales, en esta propuesta, en la misma medida,
el fundamento y el método de la estética.
El enfoque sensible
Cronológicamente, es el primer enfoque que tenemos de una obra. Es el enfoque a través de nuestros sentidos. Pero no seamos inocentes. El hombre que recibe por primera vez una obra de arte no es virgen de todo pasado, o de todo pensamiento. En efecto, el hombre es el ser del sentido y del sentido, quiero decir, de la sensación y del significado. Y la palabra más importante de esta fórmula antropológica es, por supuesto, la palabra “y”. El hombre es el ser del “a la vez”, a la vez receptor de sensación y donador de significado, a la vez gozador de sensaciones e interrogador de significado. Este enfoque sensible de la obra no es único.
Puede tener modalidades diferentes que van desde la recepción sensible, aparentemente total, a la creación sensible e intelectual de nuevas obras: del enfoque acogedor al enfoque creador.
El enfoque creador puede ser una continuación del enfoque acogedor;
no lo niega, lo completa, lo corona. Puede ser llevado a cabo de dos formas:
Gracias a una combinatoria que, al reunir varias obras, crea un conjunto,
incluso una obra. Puse en práctica tal combinación creadora, por ejemplo,
como comisario de exposición o director de colección;
Gracias a una creación propiamente dicha de obras nuevas, o sea con “el
encargo”, con “el arte potencia de dos”, es decir la creación de una obra a partir
de otra obra, con la acción del “recept-autor” de las imágenes numéricas.
Llevé a cabo, de forma asidua, encargo y arte potencia de dos.
El enfoque poético es un caso particular del enfoque creador. Es un
enfoque mediante el lenguaje en el cual el sujeto ya no está al nivel del idioma
o de la reflexión cotidiana, ni al nivel científico, teórico, analítico y conceptual:
el sujeto utiliza la imagen, lo imaginario y la metáfora, a veces la ficción,
para retener una palabra o producir una escritura que vibra al contacto
de la obra. Por ser específico y rico, practiqué este enfoque en cinco de mis
libros.
Nada como tus amigos. Imatge d'Ibai Acevedo
El enfoque teorético
Es llamado “teorético”, el enfoque teórico de una práctica considerada primero como el arte-hecho, o el sin-arte, para distinguirlo del enfoque “estético” que es un enfoque teórico de una práctica considerada primero como el arte-valor, o el arte; por supuesto, estos dos enfoques son teóricos. De esta manera, el enfoque teorético prescinde de la dimensión artística de su objeto.
Puede ser llevado a cabo por la filosofía, las ciencias humanas –como,
por ejemplo, la historia o el psicoanálisis-, las ciencias experimentales y las
ciencias lógico-matemáticas.
Este enfoque es necesario por tres motivos: libera del idealismo, del
subjetivismo y del relativismo, ofrece nuevas representaciones del objeto
estudiado, puede ser un fundamento necesario para el enfoque estético, tal
como lo experimenté en Estética de la fotografía, Fotografía e inconsciente y
Fotografía, conocimiento y existencia.
Video directed by Silvia Grav and Samantha Shay
El enfoque estético
Este último enfoque se basa en los dos primeros. El que hace investigación en estética tiene que tener primero una relación sensible y existencial con su objeto, y luego realizar sobre ello una reflexión crítica y conceptual practicando un enfoque teorético. Entonces, después de esta antítesis teorética opuesta a la tesis sensible, puede intervenir el tercer momento de la dialéctica, quiero decir la síntesis estética que, gracias a una transformación, reúne lo que ha estado separado y va más allá de lo que ha sido negado. Por ello, el enfoque estético es a la vez existencial, crítico y conceptual: existencial, porque una obra de arte en su creación y su recepción afecta muy de cerca la existencia del sujeto; crítico, porque va más allá de las representaciones estereotipadas y de los presuntos inmediatos; conceptual, porque busca establecer una teoría gracias a unos conceptos especificados rigurosamente y articulados entre sí. Para desplegarse, la estética cumple tres funciones: la descripción, la problematización y el juicio de valor.
La descripción tomará sentido siempre que se articule con una problematización. Son las dos, realizadas en función de juicios de valor. Es “axiológica” tal orientación de la estética que toma en cuenta la cuestión del juicio de valor. Afirmar la existencia de esta posible dimensión de la estética es doblemente necesario: por una parte es de iure una tarea ideal para cumplir, a pesar de ser de facto difícil y quizás a veces imposible; por otra parte es la condición de posibilidad de una crítica de arte que quiere ser otra cosa que imprecación o anatema, simplificación o arbitrariedad, ideología o moda.
Una estética es especifica según tres puntos de vista: Considerando su relación con el enfoque teorético, el enfoque estético se compone primero en su fundamento de una estética primera que es la resultante directa de los conocimientos teoréticos. Constituye el fundamento de todo el edifico estético. Sobre este zócalo estético pueden venir a tomar sitio y sentido estéticas segundas. La investigación en estética tiene primero que ceñirse a un sector estrecho, preciso y limitado a una “región” dada; la estética tiene que ser primero regional. S
ólo paciente y prudentemente puede pretender ser más general.
“Regional” y “general” son conceptos operatorios relativos y correlativos
entre sí.
Esta última estética puede ser una generalización de una o de varias
estéticas regionales: es entonces el fruto de una inducción generalizante realizada
a partir de una o varias estéticas regionales. Esta estética inductiva se
distingue de una estética deductiva general que sería el fruto de una deducción
llevada a cabo a partir de una filosofía. Mi estética es, por supuesto,
inductiva.
Autoria: Desde una estética de la fotografía hacia una estética de la imagen François Soulages