1. Características del naturalismo en "La Regenta".


La Regenta ha sido aclamada como el mejor ejemplo del naturalismo español.

Clarín tiene en cuenta los condicionantes deterministas del carácter humano que delimitan genéricamente la novela naturalista desde sus inicios: 

herencia, medio social y ambiente, haciendo especial hincapié en la presión de los dos últimos. 

No podemos olvidar el movimiento literario anterior. Hay una continuidad entre realismo y naturalismo, en tanto que la novela naturalista pretende ser una imitación o reflejo de la realidad, de la vida; para lo cual el autor debe documentarse. Aquellos aspectos miméticos se complementan con las introspecciones psicológicas o análisis interiores, como los de Ana o Fermín.

Entre los novelistas naturalistas se procuraba que las novelas tuviesen acciones sencillas, sin peripecias excesivas, con cierta impersonalidad narrativa y estilo indirecto libre.  

Sí que se desmarca del naturalismo francés. Para Clarín el naturalismo no consistía en "la constante repetición de las descripciones de lo feo, lo vil y lo miserable". De hecho, encontramos muy pocos ejemplos de sordidez en su obra y todos sugeridos o en boca de algún personaje.